Ya pasó lo más difícil

Ya pasaron por Monte Alto las dos primeras escuadras de la clasificación mostrando el por qué las separan tantos puntos a unas y otras.

El Voltregá con un juego fluido y combinativo que les permite jugar todo un partido sin un sólo regate dan la impresión de que jugar a esto es fácil. Técnicamente superiores a la mayoría de sus rivales es el bloque lo que hace parecer que necesitan otra liga para ellas solas.

El Reus, plagado también de internacionales españolas y extranjeras transmiten una imagen de un equipo mucho más atado a la banda. Excesivamente dependiente de movimientos aislados que casi nunca dan sus frutos y las hacen más previsibles, hacen pensar en que tienen más para ofrecer.

El Borbolla se les atragantó mucho más de lo que refleja el marcador (1-4). Sólo un error propio finalizando la primera mitad permitió un contraataque en el que las rojinegras no perdonaron. Hasta entonces las oportunidades de las coruñesas se generaban a la contra y las de las visitantes con jugadas marcadas con inicio en estático -propias de otras ligas y otras épocas- que jamás inquietaron la meta local. Para finalizar la
primera parte lo nunca visto: con posesión de bola, a falta de un minuto y en campo propio, una jugadora reusense tira la bola fuera de banda para poder pedir un tiempo muerto. La posesión de bola tras el saque de la falta casi les cuesta un gol. Cosas veredes que farán falar las piedras.

La segunda parte comenzó con el Reus más metido en el partido y en tres minutos cayeron tres goles. Después de eso, más de lo mismo y el gol de las de Monte Alto, que siguieron teniendo ocasiones pero adolecieron de correctas elecciones de finalización.

Otra piedra de toque -y vaya piedra- en el camino hacia los encuentros con sus rivales directos. El fin de semana que viene un partido sin margen de error ante el Traviesas, con un pie fuera de la Ok Liga, y que buscarán los primeros puntos las tres temporadas que llevan en la máxima competición. Las viguesas parece que no se resignan a hundirse sin pelear y vienen avisando de sus intenciones. A punto estuvieron de traerse un resultado positivo de su visita ante otro gallito, el Alcorcón. Para el Borbolla se trata de tres puntos vitales para una permanencia que siempre han tenido en sus sticks.